COMETAS EN EL CIELO DE KHALED HOSSEINI
Reseña Literaria enviada por Alejandra Gallero Urizar del 12 Mayo de 2010

Género: Novela ficción / Editorial: Salamandra S.A. / Traductora: Isabel Murillo Fores.

Primera novela del autor que lo lanzó a la fama al publicarse en febrero del 2007. Khaled Hosseini ambienta sus historias en el país en que nació en 1965, Afganistan, ciudad de Kabul. Su padre, diplomático de asuntos exteriores de Afganistán, fue enviado por el Ministerio de Asuntos Exteriores a París, a donde viajó junto a su familia en 1976. Su madre enseñaba farsi e historia en un instituto de Kabul. En 1980 intentan regresar a su país, Afganistán, pero no fue posible debido a la invasión soviética de 1979, viéndose obligados a demandar asilo político a Estados Unidos. Allí el joven Khaled estudió y se graduó, primero en biología, y después en Medicina. Junto con hacer las prácticas en el hospital, escribió su primera obra: Cometas en el cielo. Hay cierta semejanza entre la vida del autor y la de su personaje principal, Amir, lo que hace suponer que la novela podría tener un toque autobiográfico.
El libro narra la vida de dos niños, Amir y Hassan. El primero de 12 años de edad, un pastún hijo de un rico comerciante de Kabul y el segundo, un año menor, perteneciente a la etnia hazara, hijo del sirviente de la casa en que viven.

Amir es el narrador de esta historia. Su voz es ya la de un hombre atormentado por la culpa que arrastra desde los doce años de edad. La amistad, el amor y el desamor, la lealtad y la traición, son los ingredientes que conforman su historia y frente a los que intenta evadirse, aunque los recuerdos y el remordimiento le acechen constantemente. Desde la mirada adulta cuenta y analiza los hechos ocurridos durante su infancia junto a su amigo Hassan.

Al comienzo, cuando Amir y Hassan eran unos niños, el país gozaba de tranquilidad, celebraban sus fiestas, cumplían con las oraciones contempladas en el Corán, pero sobre todo vibraban frente al concurso de cometas que se celebraba durante las primeras heladas del invierno. Competían los niños, mientras los adultos presenciaban expectantes a la espera que fuese su hijo el ganador, máximo orgullo.

Luego, la invasión rusa lo cambió todo. Los tanques circulando por las calles con soldados armados hasta los dientes por las calles de Kabul, transfirió la paz en miedo.

Cuando los talibanes sacaron a los rusos de escena, el pueblo creyó que el cambio significaría paz. Gran error, la vida se convirtió ahora no sólo en miedo, sino que además en un mundo de silencio: se prohibió la música, el baile, destrozaron radios y televisores, incluso nadie podía subir el tono de voz sin arriesgarse a recibir el castigo. Obligaron a todos los hombres a usar barba hasta el pecho y turbantes negros en la cabeza. La discriminación entre pastunes y hazaras se hizo más cruel.

Es durante estas tres etapas que se desenvuelve la trama de la novela.

El autor describe con detalle y certeramente lugares y emociones. Los personajes están muy bien delineados: Amir, el niño que cuenta con todo lo material, pero que siente la falta de afectividad por parte de su padre, lo que lo llevará hasta la traición con tal de conseguirla. Hassan, en cambio, es un niño que no sabe mentir, que ama a su amigo a cualquier costo y está dispuesto a hacer todo lo que él desee, aunque tenga que pagar un alto precio.

Hay personajes cuya bondad es implacable, tales como Alí, el cojo e inexpresivo padre de Hassan y Rahim Kam, amigo del padre de Amir, quien, dándose cuenta del dolor que se agita en el pecho del pequeño Amir, trata de brindarle las manifestaciones de cariño y amistad que su padre le niega. Es él quien lo impulsa a escribir, así como también es él, al final de su vida, el que le muestra el camino hacia su redención.

Hay valores y antivalores muy marcados a lo largo de la novela: la honradez, la lealtad, el amor incondicional, la búsqueda de la redención. En la contraparte se encuentran la crueldad, el abuso hacia el más débil, la corrupción y falsedad de los que se encuentran en el poder que predican e imponen normas para que las cumpla el pueblo. Otra realidad se vive en las mansiones de las que se han apoderado los talibanes. Allí cometen todo tipo de aberraciones impunes y seguros tras el poder de las armas.

Es esta una novela llena de color, en donde se pueden percibir los aromas y sentir las emociones. El estilo del autor es de tal naturalidad y sencillez que, aunque el relato es en gran medida cruel, el lector lo disfruta porque está exento de morbosidad o afán de sacar provecho de esa veta. Priman los sentimientos y emociones positivas por sobre la maldad que los rodea, tal como ocurre con las mentes infantiles en donde no ha penetrado la corrupción.

Un libro cuyo sabor lo acompañará durante mucho tiempo…

Alejandra Gallero Urízar
Junio, 2010.